Enero17

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martes, 3 de septiembre de 2013

Yo quiero Creer...

Desde los primeros tiempos la humanidad ha tenido la necesidad de creer, historias pasadas de generación en generación y escritas después nos cuentan de la devoción a tal o cual dios o dioses, postes sagrados, cultos fálicos, dios del sol, de la tierra, las culturas antiguas han girado en torno a la devoción y lo espiritual, desde su principio, hasta el punto que el poder gubernamental y militar estaban supeditados al poder religioso de chamanes, sacerdotes, oráculos y demás.
Al pasar el tiempo la gente se ha dado cuenta que los dioses no responden de la misma forma que antes, la ciencia ha desvirtuado muchos de los antiguos milagros venerados…




Pero la necesidad de creer en algo superior no ha cambiado, solo ha mutado en algo diferente,
Ahora la humanidad tiene multiplicidad de otras cosas en las cuales creer, desde cosas como extraterrestres, conspiraciones hasta la devoción ciega por un equipo de futbol, el cantante de moda, una serie de televisión, fanatismos que llevan hasta “dar la vida” por uno o por otro.
La devoción hacia las drogas, el cigarrillo, el alcohol, si bien no son una religión establecida que yo sepa, llevan a la gente a actitudes tan devotas como las de una fe religiosa.
Es innegable que la humanidad necesita creer en algo, desde ateos hasta descreídos de dios se vuelcan a alguna devoción, tal vez ideas políticas, personalidades encumbradas de la sociedad, y muchos ejemplos más que usted mismo/a puede pensar.
En este punto es bueno autoanalizarse, ¿en que creo yo?
Cada cual tendrá su respuesta, pero es una obviedad que la gran mayoría de la gente en nuestra sociedad cree en el poder del dinero como el fin de sus problemas, o el principio?
Para comenzar a entender nuestra posición en el cosmos, es necesario empezar a conocernos.

Con estas líneas mi humilde objetivo es poder amigo/a lector darle un punto de partida para la introspección.